Noviembre 5, 2014
Murales en las fachadas: ¡un desafío de color para KL!
“¿Por qué no hacemos algo parecido a un Bansky?” sugirió un día alguien de nuestro equipo creativo. Por qué no, pensé.” Nuestra obra solo tiene que ser más grande, más brillante, mejor… que la de Banksy (cof)” dije. “Así, nuestro logo se verá más fácilmente” :).
Meses después, varias ciudades de Rusia tenían la pared lateral de algunos apartamentos iluminadas con un alegre, multicolor y deslumbrante mural.
Aquí tienes algunas fotos… no está nada mal. Me gusta. Me gusta mucho 🙂
El reto de @e_kaspersky a lo Banksy… más o menos.Tweet
Ahora bien, no puedes llegar un día y empezar a pintar alegremente toda la fachada de un edificio en Rusia. Probablemente, igual que sucede en otros países. No, hay que superar muchísima burocracia y otros obstáculos. No obstante, con perseverancia, lo conseguimos. Sí, ya hemos terminado nuestros graffitis, en bloques de apartamentos en Gatchina, Salavat, Moscú, y (recientemente) Severodvinsk. ¡Hurra!
Resulta que pintar la fachada que da a la calle de un edificio fue la parte más sencilla y rápida de todo el proceso, de principio a fin.
Antes de coger los pinceles y empezar a pintar, hacen falta varios meses para que se acepte el proyecto y conseguir los permisos pertinentes. Además, la reacción típica a la idea de pintar un edificio es categóricamente negativa. “¿Qué? ¿Un graffiti? ¿Un mural artístico? ¿En un edificio? ¿Habitado? ¿Estás mal de la cabeza?”.
A pesar de todo, hubo un par de sorpresas agradables, incluso en Salavat, cuyas autoridades nos concedieron los permisos rápidamente para algunos edificios, pero nos dieron instrucciones específicas sobre qué pintar. Con otras cosas cooperaron mucho y nos ayudaron a facilitar el proceso. Se lo agradecemos. Muchas gracias: ¡lo apreciamos mucho! En mi humilde opinión, se ve claramente por qué estaban tan interesados: fíjate en la transformación.
Ahora, tras el éxito cosechado con el proyecto de pintar las fachadas de algunos edificios, deberíamos tenerlo más fácil. Con cada proyecto nuevo recibimos más y más aceptación de los organismos competentes, y están más dispuestos a recibirnos. Y por supuesto, nuestro “CV” donde se ven todos los proyectos que hemos realizado, le da a las autoridades algo tangible que les ayuda a aceptar un mural de este tipo en sus ciudades e involucrar a los lugareños.
Hablando de lugareños…
Normalmente, al comienzo del proceso, los habitantes de la ciudad están algo perplejos. Se acercan a los artistas y les hacen todo tipo de preguntas y peticiones para ver sus permisos de trabajo. A veces, incluso, amenazan con llamar a la policía. Pero después, normalmente, desisten, maduran la idea, y tras pasar varios días observando cómo trabajan, se hacen a la idea. Hasta las abuelitas traen tartas y termos con té. En general, con el tiempo, conseguimos su aprobación. Todo bien :).
No me importa el mural, ¡yo solo quiero mi juguete!
Para cada graffiti se necesitan dos artistas y una semana, más de 100 litros de pintura.
Para pintarlos, a veces hay que enfrentarse a condiciones climáticas extremas. Como pasó en Severodvinsk:
“Nos sentimos muy expuestos a las condiciones climáticas. Nos empapamos con la lluvia, casi nos cocemos al Sol, hizo un viento huracanado, y cuando ya casi estábamos terminando, hacía un frío polar (llegamos a los -7ªC bajo cero) e incluso nevó. ¡Todo esto en una semana! Creo que es justo decir que fue extremo. ¡Decidir qué ropa era la más adecuada resultó ser una pesadilla!
Pero al final todo mereció la pena: además de los bondadosos habitantes y los submarinos del cercano Mar Blanco, la ciudad tiene ahora un nuevo atractivo turístico, ¡nuestro mural!”.
Además, al pintar no todo ha sido coser y cantar.
Por ejemplo: una de las paredes que pintamos en Moscú, fue pintada de nuevo recientemente. No sabemos quién es el responsable, y las autoridades dicen que tampoco lo saben. No obstante, no parece el trabajo de unos vándalos callejeros, ya que para hacerlo se necesita un equipo bastante costoso, por no mencionar el apoyo “oficial”.
No pasa nada: ¡tendremos que restaurarlo de nuevo!
No obstante, en general, todo el proyecto fue un éxito. Mucho mejor tener estos alegres murales que una pared gris insípida. Después de todo, nuestras infraestructuras no son tan geniales como las de, digamos por ejemplo, Singapur, Magdeburgo o Barcelona, así que tenemos que pensar de forma menos convencional y ser creativos para darle vida a las cosas. Espero no ser el único/los únicos, a los que les guste la idea, y que otras empresas de IT, o cualquier tipo de compañías, se una a la diversión. ¿Quizá incluso el mismísimo Rey Bansky se anime? :).
Aún más cool sería crear una reacción en cadena, algo como el “Ice Bucket Challange“: pintar una pared y luego desafiar a otras tres empresas a hacer lo mismo, y así sucesivamente, por todo el mundo, y si no aceptan, ¿pagan la mitad del precio del proyecto?
Creo que para que funcione a escala global vamos a tener que involucrar a nuestras oficinas de todos los países, pintando ciudades por todo el continente, creando un espíritu competitivo, poniendo a prueba la habilidad creativa nacional y su prestigio.
Nuestros empleados de Social Media dicen que tienen más propuestas creativas para desarrollar y llevar lejos esta idea.
Mientras tanto, tú, querido lector, ¿tienes alguna idea? Acéptalo, has tenido tiempo de sobra para poner a trabajar a tus células grises, y si no tienes hasta el final de este post para hacerloJ.
Ideas>se agradecen los comentarios.
Y por último y quizás ¡LO MÁS IMPORTANTE! También espero las coordenadas de más bloques de apartamentos cuyas paredes exteriores necesiten un lavado de cara… preferiblemente acompañado de fotos y razones que justifiquen la necesidad de ¡una reforma multicolor de Kaspersky!
