Kaspersky Racing Green en Milán

Hola amigos, os saludo desde la ciudad de la moda, Milán, ¡con un día soleado y una temperatura de 28 grados!

¿28 grados? ¿Y qué? Después de todo, es verano. Sí, hace dos semanas las temperaturas en Moscú alcanzaban los 28 grados. Pero en los últimos días la capital rusa ha rondando los 7 grados y casi no ha parado de llover (¡incluso he oído que el fin de semana cayó granizo en San Petersburgo!) ¿Qué está pasando? Moscú no está en Groenlandia, ni tampoco en Kamchatka (donde a nadie le sorprende que nieve en junio). ¡Se encuentra en la templada meseta central rusa! Aun así, debería de estar agradecido de que no haya ido tan mal como en París…

A través de la ventana de mi habitación tengo una gran vista de la estación Central de ferrocarriles de Milán. ¡Qué grandioso ejemplo de arquitectura!

A pesar de que ya he entrado varias veces y de que siempre me ha sorprendido, he decidido echar otro vistazo (solo para aliviar mi esclerosis).

Es monumental. Imperial. Salas enormes, columnas colosales. Mucho espacio para maniobrar, una belleza que durará en el tiempo:).

Y aquí están los andenes y los trenes. Al caminar por la terminal, ¡hay veces en las que se te olvida que estás en una estación de trenes!

Es probablemente la mejor cerveza estación del mundo. Al menos, no he visto otra mejor.

Grrr… Este ha sido todo mi turismo en esta ocasión. Solo estaré aquí durante el día por otra conferencia de socios, esta vez (sí, esa) la europea: la última de la temporada.

Había una distribución diferente este año: no había escenario y el salón estaba dividido en dos con los altavoces en medio. De nuevo la mayor atracción era un coche Ferrari de F1 (a nuestros colegas de Europa les encanta y lo llevan consigo a todas partes).

Toques finales: neumáticos de F1, una bandera a cuadros como suelo, y una “pista” extendida a lo largo de la sala a modo del British Kaspersky Racing Green. ¡Es perfecto!

Ahora tengo que darme prisa para volver a viajar. ¡Volveré pronto, amigos!