Mayo 5, 2015
CUATRO BILLETES PARA AOGASHIMA. PARTE 2: HACHIJO-JIMA
Un resumen de la primera parte:
7 am. Un vuelo de Tokio (Haneda) a Hachijo-jima, luego una escala rápida, un vuelo en helicóptero a Aogashima, donde pasamos el día explorando, escalando y fotografiando cada rincón de la isla. ¡Qué bonita!
Cuando desperté la siguiente mañana a las 7:30 sentía un deja vu, pero esta vez al ‘estilo boy scout‘, acompañado por una voz animada que provenía de los altavoces del hotel: “pim pam pum pom ohayoo gozaimasu (esto es “buenos días” en japonés). Después hubo más palabras en japonés pero sólo entendí ‘arigato’ y ‘kudasai’. Luego nos levantamos de los colchones de paja, desayunamos y volvimos al helipuerto.
Quiero recordar que solo hay un vuelo al día en helicóptero, siempre y cuando haga buen tiempo. Si no es el caso, no se puede volar. El vuelo Hachijo-jim – Aogashima sale a las 9:15 y llega a las 9:40 (según nuestra experiencia). Después de aterrizar, tuvimos el típico ajetreo de un helipuerto: el subir/bajar de la ‘tierra firme’, el abordaje de nuevos pasajeros (nativos de Aogashima y algunos turistas) y el despegue para el regreso.
Así que el vuelo de regreso nos dejó en Hachijo-jima sobre las 11:30 am. Nuestro vuelo a Tokyo, Haneda, fue a las 5:20 pm, así que tuvimos unas 6 horas libres. ¿Cómo podríamos pasar el tiempo? ¡Por supuesto alquilar un coche e ir a las aguas termales de onsen! Esto es lo que algunos pensamos erróneamente. Miré el mapa, vi un camino que llevaba a la cima del volcán local, y fuimos a escalar el Hachijo-Fuji (al parecer, todas las montañas sagradas en Japón se llaman ‘Fuji’), de acuerdo con este repentino plan.
Un ascenso de 300 metros (en escala vertical) por un camino bien cuidado y pavimentado nos llevó unos 25 minutos (esto es un récord para mí, normalmente tardo de 40 minutos a una hora para una subida así). ¡Aquí estamos, en la cima!
¡Las vistas no están nada mal!
Un gran cráter viejo y la ‘burbuja’ de uno nuevo en medio. Estábamos rodeados de preciosas vistas. Es por esto que me gustan más los volcanes que las montañas. En la cima de una montaña, solo hay bonitas vistas. En un volcán, tienes todo eso más la encantadora vista del cráter.
En Hachijo-jima, también puedes caminar por toda la orilla del cráter, que fue lo que hicimos. ¡Espectacular!
Después de todo eso, volvimos al pueblo para comer, visitar los onsen, y regresar..
Esta es una botella del shōchū local, un destilado muy fuerte que requiere mucha fuerza para poder beberlo. Muy recomendable. Por supuesto debes probarlo, aunque solo sea para poner a prueba tu fuerza :). El regusto, que dura unas 24 horas, es particularmente maravilloso.
Durante este viaje, tuve una idea. Hay nueve islas habitadas aquí. ¿No sería genial visitarlas todas?!Un tour saludable de todos los volcanes locales en una semana! 🙂 ¡Quizás lo haga en unos años!
El resto de las fotos aquí.
Eso es todo, ¡hasta la próxima!