Octubre 2, 2013
¡Se puede derrotar a los trols de patentes! ¡Resistiremos!
¡Atención todo el mundo! ¡Redoble de tambores! Tengo el placer de anunciaros que hemos vencido a otro trol de patentes. Tras esta nueva derrota, el enemigo está desmoralizado y como Churchill dijo en su día: ¡Nunca nos rendiremos! Hemos seguido su consejo en nuestra lucha contra un trol en particular. ¿El resultado? Éste ha huido con el rabo entre las piernas.
“Sorpresa, alegría, satisfacción y adrenalina… todo en uno”
Así ha descrito esta victoria N.K., nuestro asesor en propiedad intelectual.
Sorpresa, alegría, satisfacción y adrenalina… todo en uno. No puedo estar más de acuerdo con estas palabras. Nuestro pleito (de 18 meses de duración) con Lodsys (uno de los “tentáculos” del trol de patentes más grande y conocido del mundo, Intellectual Ventures (“IV”)) ha llegado a su fin tras la capitulación de este parásito tan abominable. Una vez más, hemos ganado en solitario mientras otras 54 compañías demandadas negociaban con el enemigo y otras abandonaban el campo de batalla. En total, este trol de patentes ha causado la baja de más de 400 empresas informáticas.
Entremos en detalle…
En 1992, un inventor tuvo una idea para mejorar los productos a través del feedback del usuario al desarrollador (patentes 7222078 & 7620565). En 2004, esta patente cayó en manos de IV hasta el 2010, año en que su subsidiaria Lodsys se convirtió en la propietaria. Se descubrió que esta patente no solo incluía el ecosistema de las aplicaciones móviles y la función In-App Purchase, sino toda la industria del software. ¿Cómo puede ser? Si un producto permite al usuario enviar su feedback al fabricante (por ejemplo, pulsando el botón “envío de errores”) entonces se está violando dicha patente. Increíble, ¿verdad? Sería como patentar la idea de Internet sin incluir las implementaciones prácticas. ¡Ay señor! Así es como funciona el sistema americano.
En marzo de 2011, Kaspersky Lab y una docena de compañías recibimos unas cartas de Lodsys donde nos reclamaba una tarifa por usar su patente o nos meteríamos en un buen lío. En la misiva, se informaba de que dicha patente incluía (i) las notificaciones sobre las últimas actualizaciones de seguridad; (ii) la asistencia al cliente mediante la descarga e instalación de las últimas actualizaciones de seguridad; (iii) nuestra tecnología en la nube (KSN); (iv) la compra y renovación de licencia incluida en el producto e incluso nuestra página de soporte interactiva. Además, si esto fuese poco, cubría cualquier interacción cara a cara con el usuario. ¡Vamos! Que esta gente quería patentar incluso la creación del universo.
En mayo del siguiente año, nosotros y otros inconformistas fuimos invitados al tribunal de East Texas (el favorito de los trols) para oír los argumentos de Lodsys al respecto. Resultó que habíamos “infringido” su patente por el valor, ni más ni menos, de 25 millones de dólares.
No os quiero aburrir con los detalles del juicio. Solo os diré que ésta no ha sido la primera vez que luchamos contra los trols así que sabemos cómo lidiar con esta plaga. Lo más importante es disponer de una estrategia para proporcionar inmediatamente toda la información necesaria (incluso el código fuente) y demostrar al juez nuestra buena disposición para solucionar el problema. Y por supuesto, derrochar calma, confianza y firmeza.
En cambio, los trols hacen todo lo posible para ponernos las cosas más difíciles. Por ejemplo, tuvimos que analizar más de 2.000 documentos para el caso en un plazo de tiempo realmente breve. Nuestros contraargumentos trastocaron al oponente de tal modo que ni tan siquiera se presentó en los tribunales. Nosotros nos mantuvimos firmes afirmando que no habíamos infringido patente de Lodsys alguna y que su denuncia no era válida.
¿Cómo terminó esta historia?
51 de las 55 compañías demandadas llegaron a un acuerdo con el trol antes de verse las caras en los juzgados. En la carrera final solo quedaron con nosotros Symantec, HP y Samsung. Lamentablemente, también causaron baja a las pocas semanas de que se celebrase el juicio. Tras días de nervios… nuestros abogados nos anunciaron que Lodsys dejaba el caso y que el juez desestimaba su demanda, prohibiendo que se abriera, de nuevo, un caso similar contra Kaspersky Lab.
¿Qué conclusiones hemos sacado de todo esto?
- Este caso demuestra, una vez más, que se puede derrotar a los trols de patentes.
- Debemos vencerlos de una vez por todas o volverán a la carga para chupar hasta la última gota de nuestra sangre.
- La industria informática no está unida en su lucha contra los trols y la mayoría de las compañías prefieren seguir alimentando a estos parásitos.
- Los “grandes” del sector TI están involucrados indirectamente en el desarrollo de los trols, facilitando la extorsión a empresas más pequeñas.
- Los trols continúan siendo un problema, bombardeando a posibles víctimas con sus tonterías y sin ser penalizados por sus demandas.
- Los gobiernos deben tomar medidas específicas al respecto, como las que se incluyen en esta lista.
Por todos estos motivos, felicito y agradezco a nuestro equipo por proteger nuestra propiedad intelectual. No obstante, esta victoria ha acarreado una curiosa consecuencia: un daño irreparable en las reservas mundiales de Chivas Regal de 18 años 🙂