Nadando por el mundo – Parte 1

Los recientes deportes acuáticos extremos de la sorprendentemente soleada Groenlandia me han hecho pensar. Quizás yo podría intentar sumergirme en mi memoria para recordar algunas de las veces más inusuales, interesantes y entretenidas que he nadado alrededor del mundo – un “Top de los mejores lugares para nadar”. Nadar, darse un chapuzón, o simplemente sumergir el cuerpo en agua, además de en la bañera del hotel, que ya lo he hecho eso bastantes veces, en toda clase de lugares extraños y maravillosos…

Darse un baño: es un tema interesante – especialmente ahora, durante la temporada veraniega de R&R y viajes a la playa, y las actividades acuáticas que están aquí. Ya que quizás algunos de ustedes se encuentran cerca de alguna piscina, lago, mar u océano justo ahora, y pueden correr el peligro de perderse de lo mejor. Así que, sin más preámbulos, comencemos con las actividades acuáticas.

Veamos, el plan es este: Solo hablaré sobre natación en cuerpos acuáticos naturales. No se incluirán las mega piscinas, parques acuáticos, spas y todo eso. Solo hablaré de las experiencias más inusuales y orgánicas. Repasaremos todo el mundo, de izquierda a derecha, de arriba abajo: América, Europa, África, Asia y Australasia. No hablaré sobre la Antártida ya que no he podido nadar ahí. Ah, y por cierto: si alguien cree que me falta algo en la lista, que lo diga, en la parte de los comentarios. Se lo agradeceré mucho…

Empecemos por Norte América…

He estado en Alaska, pero al igual que cuando estuve por la Antártida, tenía otras cosas en mente, y no era nadar.. Por lo tanto, hablaré directamente sobre Groenlandia que, técnicamente, se encuentra en Norteamérica…

1. Un chapuzón entre enormes pedazos de hielo groenlandés.

Para nadar flotar en un disfraz del hombre Michelin entre enormes pedazos de hielo flotante y icebergs, tocarlos, o incluso subirse a ellos, es una experiencia inolvidable. No hay nada que temer: esos disfraces de brillantes colores son secos y cómodos. Solo tus manos tocan el agua, pero solo un poco.

Pero si hay una banya en la orilla, bien podrías hacerlo sin el disfraz de Michelin… solo que no puedes nadar por mucho tiempo en calzoncillos si te consideras una persona normal y no un masoquista. De todas formas no hay nada tan vigorizante como un chapuzón en el mar Groenlandés después de un banya ☺.

2. En un río glacial.

Aún en Groenlandia, pero esta vez en un glaciar. Probablemente no quedan muchos glaciares en el mundo de este tamaño (quizás ninguno más que este) que se derriten en el verano y forman corrientes, ríos y lagos en la cima del mismo glaciar. Agua prístina (que se acaba de derretir) que forma corrientes turquesa y lagos, con un helado desierto blanco que cubre todo lo que pueden ver tus ojos. La única desventaja es la frialdad del hielo bajo tus pies cuando nadas. Es necesario usar chanclas…

¿Entonces, que más tenemos en América del Norte? No hay gran cosa. Claro, están Florida y las Bahamas, pero no quieres intentar nadar en Everglades, y en las Bahamas, bueno, simplemente no logré llegar a la playa. ¿Miami? No es la gran cosa, y no me pareció tan increíble. En temporada alta, la playa está repleta y tienes que maniobrar muy bien para llegar al mar. También el mar está repleto. Y las opciones para nadar no son muy buenas. Esta es la tercera vez que vengo, pero en ninguna he usado cámara para fotografiar el mar, ya que no creí que valiera la pena.

No me impresionaron mucho las playas y el mar de Las Bahamas. Y también hay muchísimas precauciones: “Mantenerse en el camino”, “No nadar a más de 20 metros del borde”, “Cuidado con los témpanos”, y más ☺.

Y eso es todo desde América del Norte. A continuación, Sudamérica, donde las posibilidades para nadar son mucho más interesantes…

3. Península de Yucatán y Cancún, México: Cenotes y ríos subterráneos.

Las aventuras en el agua fresca de Yucatán son fenomenales. Hay mucho más cosas interesantes que la situación del agua de mar (Kukulkan, Riviera Maya, Cozumel). Una visita a Ik Kil es una experiencia que nunca olvidarás: subterráneamente sublime. No describiré más, mejor mirad las fotos. El agua más limpia a la temperatura perfecta para nadar, con pequeños peces nadando alegremente. Colgándose a una liana, las cascadas cayendo, y el cálido sol en el cielo. ¡Es perfecto!

Pero el río subterráneo Río Secreto (solo fotos; el texto en ruso) que no está tan alejado de Cancún es incluso mejor. Corrientes en laberinto, cuevas y grutas; estalactitas, estalagmitas… ¡vaya geología! Comienzas con el agua hasta tus rodillas, después sube a tu cintura, y después está tan alta que tienes que nadar a través de túneles y por lagos subterráneos. ¡Éxtasis subterráneo!

4. Nadando con delfines, Varadero, Cuba.

Sé que hay bastantes complejos turísticos donde puedes nadar con delfines. Pero solo lo he intentado una vez, en Varadero, hogar de interminables playas de arena blanca, y del mamífero marino más lindo. Ellos se acercan, te dan un beso, sonríen, cantan y guiñan. También hacen movimientos si escuchan un silbido del “jefe”. Si tan solo pudiéramos tenerlos como mascotas ☺.

Incluso sin los delfines, Varadero es un lugar genial. Tenéis que venir y conocer su playa al menos una vez en la vida. Nunca había visto arena tan blanca. Tan blanca que apenas se calienta bajo el apabullante sol de medio día. ¡Es increíble!

No estoy seguro de cómo se ve Varadero hoy en día, la última vez que estuve fue en 2005.

5.- Cataratas de Iguazu, Brazil.

Las cataratas de Iguazú no son aptas para nadar… pero sí para navegar en bote –¡o tal vez no!

Los servicios de turismo meten a los turistas en botes frágiles y son puestos a navegar hacia las cataratas, al menos a las partes lejanas de las cascadas. ¡Vaya escándalo! ¡Y vaya fuerza del agua que cae aquí! Y esto es solo a los lados. Algunos temerarios incluso se tiran clavados al agua. Prefiero que sean ellos los que lo hagan. Vaya, me gustan las reglas y regulaciones laissez-faire, ¡pero esto es absurdo! Mirad el bote que he señalado en la foto:

Es una pena que no hayamos traído champú. Después de todo, ¡se trata de la ducha más grande del mundo!

Bonus tracks.

Aquí hay otros lugares para nadar en Sudamérica que vale la pena mencionar…

Tal vez una de las playas más famosas en el mundo es la de Copacabana, en Río de Janeiro. Sin embargo, tal vez es más infame que famosa, ¡ya que se trata de una de las playas más peligrosas en el mundo! Todas las playas en Río y sus alrededores tienen niveles criminales altísimos.

Así que ¡tened cuidado!

En la otra orilla del espectro en términos de fama e infamia se encuentra otra playa brasileña llamada Salvador. Con arena dorada y dunas onduladas a lo largo de la costa brasileña en el Atlántico, es una playa extraordinariamente hermosa que necesitas visitar — especialmente si ya has estado en lugares así y buscas algo diferente…

Yo había ido solamente una vez, pero el clima era realmente malo; por lo que he vuelto para vivir la experiencia correctamente…

Recomiendo visitar este sitio, pero solo si te gusta el turismo a lo “nativo”. No a muchos turistas llegan hasta esta playa, así que necesitarás saber un poco de portugués para llegar hasta aquí. Pero para aquellos introvertidos, este puede ser un sitio correcto para vosotros, ya que no hay multitudes de turistas fastidiando el momento :).

Cualquier guía de los mejor lugares para nadar en Sudamérica no estaría completa si no incluyera a Valparaíso en Chile. Aquí la historia de cómo llegué ahí.

Mientras me encontraba sentado sobre una roca en el Polo Sur durante un mes de Enero, como se suele hacer, planeando nuestra ruta de regreso a Moscú, mis acompañantes viajeros y yo decidimos pasar algunos días en una playa calurosa para recuperarnos y aclimatarnos después del intenso frío en el Antártico. Fue entonces cuando recordé cómo nuestros Klers chilenos hablaban del maravilloso resort en la playa que tenían. Y como estaban en la mitad del verano allá, con la playa a 33° al sur (como Tel Aviv está a 33° al norte), decidimos ir a  aquella playa tan alabada.

¡Y despegamos!

… y estábamos sorprendidos: una playa maravillosa, un cielo azul, y una temperatura al menos en los 30s, pero las miles de personas presentes en la playa… estaban en esa playa; no en el mar. ¡Qué extraño! ¿Por qué? Tal vez ya están acostumbrados al océano y no les parece nada especial (como lo es, por ejemplo, para un ruso, quien invariablemente vive bastante lejos de cualquier mar:). ¿Tal vez ellos están acostumbrados a temperaturas alrededor de 30 grados?…

Naturalmente, decidimos descubrirlo por nosotros mismos. Y enseguida entendimos por qué nadie estaba en el mar…

….¡Estaba helada!

Brrrr. Así que decidimos descartar la playa e ir a visitar el pueblo y sus graffitis…

Y visitar los buques de carga europeos…

…¡con este pequeño amigo en el bulbo de la proa!

Cómo ha llegado él ahí jamás lo sabré :).

Y con esto concluimos el tema de los lugares naturales americanos para baño y nado.

¡Muy pronto vendrán más continentes!…