Octubre 19, 2016
Un pequeño paso en la gran seguridad industrial
El otro día, Innopolis (el pueblo tecnológico que se encuentra al lado de la ciudad de Kazan, Tatarstan, a 800 km al este de Moscú) se convirtió en un “centro mundial de ciberseguridad para sistemas industriales”.
Estuve aquí a principios de año asombrado por la velocidad del desarrollo y la ambición de sus planes mientras que pensaba en sus propósitos de futuro.
Para empezar, permitid que empiece con los elogios: me quito el sombrero por la determinación y la persistencia de las autoridades locales, la confianza de los socios y los patrocinadores y, también, por la profesionalidad de los contratistas y de todos los que han tomado parte en hacer de Innopolis una realidad.
Innopolis se construyó de la nada en solo tres años de acuerdo con un concepto de alta tecnología para compañías de alta tecnología: aquí hay una infraestructura excelente, tanto para vivir como para llevar a cabo negocios, una zona económica especial, universidad y un aeropuerto internacional que no está muy lejos.
Aquí, las ventajas y también los precios son tan atractivos ¡que podrías plantearte dejarlo todo para mudarte a Tatarstan! En invierno hay pistas de esquí, en verano está la cancha de golf, en otoño está la recogida de setas y, durante todo el año, está la pesca en el río Volga. Un apartamento de 50 m2 de una habitación cuesta 7 000 rublos (unos 100 €) de alquilar y un apartamento con dos habitaciones cuesta 10 000 rublos (unos 150 €), cuentan con ascensor para el aparcamiento subterráneo, el cual también cuesta muy poco (unos 1 000 rublos mensuales, unos 15 €). ¡El gimnasio y la piscina cuestan solo 15 000 rublos anuales (220 €)!
Además, todo es nuevo, brillante, moderno, con estilo y supertecnológico (no tiene nada que ver con sus alrededores rurales y provincianos).
Solo hay una cosa que lo arruina: Innopolis está rodeado de zonas sucias y de obras en construcción. Pero es obvio que no será así para siempre. Al parecer, se construirán más apartamentos residenciales que crearán un paisaje bonito y verde que seducirá la vista.
Así que, como puedes comprobar, no cabe duda de que ya hay cola para venir aquí a vivir/estudiar/trabajar.
Sabíamos que debíamos ponernos rápido a la cola, por lo que ahora somos los primeros en ella: llevamos cooperando con la universidad seis meses. En verano abrimos nuestro Centro Industrial de Seguridad; llevamos a cabo sesiones de entrenamiento regulares sobre la protección de objetos industriales de ciberamenazas, desarrollamos nuevas soluciones, dirigimos conferencias temáticas e intercambiamos todo tipo de conocimiento.
El otro día estuvimos en Innopolis para anunciar ¡la creación del primer ICS-CERT comercial de Rusia para la seguridad industrial!
Pero ¿qué es un CERT y por qué es necesario?
Un incidente informático (sea un ataque de malware o la caída de un sistema) puede provocar acciones inapropiadas y transformar una simple molestia en una auténtica pesadilla a escala colosal. Y esto sucede también con las instalaciones industriales en las que las pesadillas irreales de escalas colosales fácilmente pueden ser catástrofes.
Un CERT (Equipo de Respuesta ante Emergencias Informáticas) es un grupo de especialistas de diferentes compañías que recopilan y clasifican información sobre incidentes de gran repercusión mediática, que desarrolla medidas de contención y coordina las acciones de los fabricantes de equipos y operadores. Un ICS-CERT (un Sistema de Control Industrial CERT) es un ente de un sector específico e independiente que puede responder por completo a las preguntas “¿qué ha pasado?”, “¿quién es el culpable?” y/o “¿qué hay que hacer?” si sucede algo desagradable en el campo de la seguridad industrial.
Un momento, hay más. Al principio de esta publicación dije que Innopolis se había convertido en un centro mundial. En realidad, no he exagerado. Quiero decir, en Rusia no he visto nunca nada tan especializado, preciso y bien hecho en cuanto a lo que se refiere a este tipo de actividad.
También tuvo lugar la cuarta conferencia anual sobre ciberprotección industrial, además de una pequeña exposición de soluciones protectoras para procesos tecnológicos.
Este año, la conferencia también ha tenido un toque “internacional”: petroleros italianos, alemanes e incluso texanos participaron.
También llevamos a cabo una sesión de formación para especialistas, jugamos a algunos juegos de seguridad industrial y lanzamos la nueva versión de nuestro cybermap en el que aparecen los incidentes con sistemas industriales.
Y, de postre, fue la final de nuestra competición internacional de descubrimiento de vulnerabilidades en equipos industriales: ¡no se me ocurre mejor forma de encontrar defectos en nuestra protección industrial, de perfeccionarla más para salvar el mundo!
¡Vaya! Han sucedido tantas cosas en Innopolis (y todas estupendas). Por supuesto, solo es un pequeño paso, pero nos acerca a una mayor seguridad para la humanidad :).